Desde pequeña siempre fue de carácter fuerte, de esas niñas a las que no es fácil convencer, sobre todo cuando tienen una meta o un objetivo bien trazado. Nació en la Ciudad de México en el año de 1987, Isabel Delgado, Isa como suelen llamarle sus compañeras de selección nacional, ingresó a la natación apenas a los tres años e inmediatamente un par de años más tarde entró a la disciplina de nado sincronizado, deporte que marcaría su vida entera.

Isabel Delgado fue parte de esa generación talentosa del Seguro Social, vivió los últimos momentos de gloria del tradicional y muy competitivo equipo de nado sincronizado del IMSS. A los 15 años, Isa, ingresó a la selección nacional y fue abriéndose camino poco a poco hasta llegar a ser parte fundamental de un equipo altamente competitivo.

“Mi carácter fuerte, me ayudó en el deporte, a salir adelante, a no dejarme caer, me ayudó a lograr todo lo que logré dentro del deporte y también en el ámbito profesional. Ya sabes, el nado sincronizado es una disciplina super exigente, y ese carácter me daba la determinación necesaria para lograr mis objetivos.”

Isabel no solo logró una carrera deportiva exitosa, sino que además demostró que la vida de una deportista de alto nivel en el nado sincronizado en México no necesariamente es muy corta, como suele suceder, pues su nivel y constancia la llevaron a permanecer 25 años en el nado sincronizado.

“Elegir el mejor momento de mi carrera es difícil, pero los Juegos Olímpicos son eventos que te marcan para siempre, diría también que los juegos Panamericanos (Toronto 2015) que representaron mi última competencia seguramente por eso fue muy especial, y pues además logramos esa medalla de plata en la prueba de equipos que fue muy especial para mí, y pienso que para el nado sincronizado de México también.”

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El equipo Méxicano que logró plata en la prueba de equipos en los Juegos Panamericanos de Toronto en el 2015. Karem Achach, Karla Arreola, Isabel Delgado, Nuria Diosdado, Evelyn Guajardo, Joana Jiménez, Samanta Rodríguez, Jessica Sobrino y Teresa Alonso.

“Mi evento favorito sin duda podría ser Beijing 2008, mis primeros juegos, es una sensación indescriptible, el escenario era impresionante, la alberca, el ambiente, el viaje larguísimo, mucha gente no sabe, pero un año antes estuve a punto de retirarme, fue algo muy complicado, y llegar ahí pararme en la plataforma y pensar ¡no me retire, aquí estoy y estoy cumpliendo mi sueño! No sé, Beijing marco mi carrera, fui una antes y después de esos juegos olímpicos.”(Isabel Delgado también representó a México en los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012)

A poco más de dos años de retiro del nado sincronizado, Isabel Delgado, emigró a una disciplina igualmente desafiante con un muy diferente sistema y modo de competencia, inició en las carreras llamas Spartan Race (Las Carreras Spantan constan de recorridos que bien pueden exigir correr, nadar, arrastrarse por el suelo, saltar, trepar, colgarse y mantenerse en equilibrio sobre un objeto delgado entre otros. Las distancias varían según el evento)

“Es complicado comparar al nado sincronizado con las carreras, me fui del agua, de la sonrisa, de la técnica, lo artístico, el movimiento sutil, la expresión, el equipo, los jueces, a los tenis, el lodo, tierra, rasguños, moretones, sangre, y a estar con uno mismo. En lo único se parecen es la disciplina, el compromiso, es un deporte individual, los resultados dependen totalmente de mí, las preparaciones son totalmente diferentes, algún día intente evaluar donde me cansaba más o donde es más complicado, pero las dos son muy pesadas, las dos muy demandantes, cada cual en su tipo y estilo. Perdí la flexibilidad, pero ahora soy más fuerte en músculo, es difícil compararlas, las dos tienen sus lados muy pesados las dos tiene sus partes extenuantes.”

Debido a su alta competitividad, compromiso, y ganas de salir adelante, Isabel, se tomó las carreras muy enserió, ha logrado llegar a campeonatos mundiales en donde ha representado a México y esta rankeada como la número 5 a nivel nacional.

“Mis logros en las carreras, casi todas son nacionales, solo una en mundial, ambos me saben bien, saben a gloria, un buen resultado en las carreras me sabe, los resultados en sincro eran compartidos, ahora es diferente pues aquí el resultado solo depende de mí. He tenido buenos resultados en las carreras y gran parte se lo debo al nado sincronizado.”

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“La primera carrera fui 7mo. El año pasado fui al mundial de Toronto, tengo tres clasificaciones a mundiales, mi objetivo es volver a ir y mejorar en el mundial, el año pasado no sabía a que me enfrentaría, y me gustaría que en mi próximo mundial me fuera mucho mejor.”

Finalmente aprovechamos para saber que piensa una deportista doblemente olímpica en nado sincronizado, que lleva tatuado, literal, el olimpismo en la piel, sobre el cambió de nombre que aprobó la FINA para la disciplina.

“No me gusta, no le veo la relación de natación artística a lo que es el deporte, siento que el nombre de nado sincronizado queda mucho mejor y más acorde.”

Isa, hoy día es instructora personal de natación, sigue entrenándose con la misma responsabilidad de cuando sus días de seleccionada nacional, mantiene en sus recuerdos, en sus sentimientos, en su historia, en los recortes de periódicos que guarda su familia, como uno de los tesoros más grandes de todas y cada una de sus presentaciones, en sus medallas y en la historia reciente del nado sincronizado de México, el cariño y reconocimiento al valor y la determinación de una talentosa joven que decidió nadar cada rutina, como una verdadera sirena espartana.

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